Energías renovables: ¿realmente se les puede culpar por el gran apagón de España?

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El gran apagón del 28 de abril dejó sin energía a España y Portugal durante cerca de 10 horas, con lo que fue uno de los peores de los últimos años.
El gran apagón del 28 de abril dejó sin energía a España y Portugal durante cerca de 10 horas, con lo que fue uno de los peores de los últimos años. AFP - MIGUEL RIOPA
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Aún no se conoce muy bien cómo España y Portugal vivieron un gran apagón durante horas el pasado 28 de abril. El Gobierno español descarta un ciberataque, según dijo ante el Congreso Sara Aagesen, la ministra para la Transición Ecológica, este 14 de mayo. En el medio, quienes respaldan la energía nuclear están responsabilizando a las energías renovables.

La ministra Sara Aagesen, quien lidera la comisión de investigación creada para averiguar las razones de la desconexión energética en España, argumenta que se comprobaron tres oscilaciones en las subestaciones de Granada, Badajoz y Sevilla. Pero, aclaró que todavía falta determinar si esas variaciones estuvieron relacionadas con el apagón. 

La intervención de Aagesen volvió a poner sobre la mesa un debate que se había retomado desde el apagón, cuando los defensores de la energía nuclear española culparon sin pruebas a las energías renovables. Un choque de tiempo atrás, pues la energía atómica está siendo desmantelada en el país; mientras que por el otro lado repuntan las fuentes limpias como la solar y la eólica. 

De hecho, España es el segundo país de Europa con mayor porcentaje de energías renovables, después de Alemania. Un 56,8% de sus fuentes energéticas provienen de las eólicas, la solar y la hidráulica entre otros, de acuerdo con el Informe del Sistema Eléctrico de 2024. Esto está por encima del 43,2% de las energías no renovables, dentro de las cuales las de mayor participación son la nuclear, con el 20%, y el ciclo combinado, que utiliza gas, con el 13,6%. 

Desde 2023, la energía renovable de España genera más de la mitad de la electricidad de todo el país y ha crecido progresivamente. El repunte en los últimos años ha sido grandísimo, pues hasta hace unos años, las energías renovables proveían menos de la mitad del suministro eléctrico español. Pero esta tendencia se revirtió por primera vez en 2023 y, desde entonces, fuentes como la eólica y la solar han crecido sostenidamente.

En contraste, el Gobierno español, encabezado por el socialista Pedro Sánchez, decidió cerrar los cinco reactores nucleares que tiene el país y hacerlo de manera paulatina hasta el 2030.

Pero, con el apagón, los defensores de la energía nuclear presionaron una vez más, culpando a las renovables de la falla eléctrica y argumentando que esto evidencia la necesidad de que los reactores sigan funcionando; una versión que desmiente el presidente del gobierno. 

Acusan a las energías renovables por ser asíncronas

Las críticas a las energías limpias se concentran en el hecho de que, al depender del sol y del viento, su oferta no es constante; como sí ocurre con el gas o los reactores nucleares. Eso es importante porque todos los sistemas energéticos funcionan cuando hay un equilibrio entre la energía que se ofrece y la que demandan los consumidores. Ese equilibrio es el que permite que Europa pueda tener una frecuencia de 50 hercios. 

Pero si una de las centrales eléctricas falla, las otras deben poder sostener toda la demanda y reemplazar a las renovables suele ser más complicado por la inercia, un concepto que le explicó a France 24 Ismael Morales López, responsable de políticas climáticas de la Fundación Renovables de España. 

“Los sistemas térmicos y la hidráulica tienen sistemas síncronos, es decir que giran sincronizados a una misma velocidad para generar electricidad. Dan 50 vueltas por segundo y, por eso, la frecuencia de la red son 50 hercios en España, mientras que en América Latina son 60. En contraste, lo que pasa con las renovables, sobre todo con la fotovoltaica y con la eólica, es que son asíncronas. Es decir, que no se puede controlar exactamente las vueltas que dan por segundo porque dependen de la velocidad del viento y la potencia de la luz solar”, indicó. 

España es el segundo país de la Unión Europea con más porcentaje de energías renovables en toda su matriz energética.
España es el segundo país de la Unión Europea con más porcentaje de energías renovables en toda su matriz energética. AFP - CESAR MANSO

Para los casos en los que una de las fuentes energéticas falla, la inercia es el concepto vital, porque es lo que permite regular la frecuencia; y a hoy, solamente las nucleares o las hidráulicas pueden aumentar o disminuir la inercia según lo que se necesite. “Eso, por ahora, no puede pasar con las renovables. Pero en el futuro sí que se podrá aportar inercia sintética a través de la fotovoltaica, aunque para ello en España se debe permitir cambiar los procedimientos que ya se aplican en otros países”, indicó Morales. 

Lecciones del apagón: aumentar interconexiones y almacenamiento de renovables

Otra de las dificultades que tuvieron España y Portugal durante el apagón es que están prácticamente desconectadas del resto de Europa por sus condiciones geográficas. La Península Ibérica limita al sur con Marruecos y al norte solo con Francia, teniendo que superar la barrera de los Pirineos. Por un lado, eso les ayudó a regular los precios de la energía en medio de la guerra de Ucrania; pero en urgencias como el apagón, tienen menos opciones de ayuda, pues comparten menos fronteras que sus pares centroeuropeos. 

“Los países centroeuropeos tienen muchas más fronteras y muchísimas más interconexiones con más de dos o tres países, lo que te pueden aportar inercia y generación extra de energía cuando tú la necesitas”, explicó el experto. Morales agregó que España tiene un plan para aumentar las interconexiones energéticas y pasar de 2.000 hasta 4.000 megavatios generados con esas alianzas. 

Aunque por el otro lado, su aislamiento benefició al respeto de los europeos. “Lo que ha pasado es el mal menor porque pudo haber sido peor. Lo que pasó fue que hubo un fallo en la frecuencia, Francia lo detectó y se desconectó para evitar que el apagón los afectara también a ellos y, a su vez, a toda Europa”, precisó Morales.

Aun así, desde la Fundación Renovables resaltan la importancia de que España y Portugal aumenten sus interconexiones para sortear problemas futuros. 

Otra de las soluciones en las que enfatiza Morales es aumentar la capacidad de almacenar la energía que las renovables producen. “Ahora mismo, tenemos muchísima fotovoltaica que se genera constantemente durante las horas de sol. Pero parte de esa energía es excedente. Es decir, se genera mucha más electricidad fotovoltaica de la que necesitamos y se produce principalmente en los picos de baja demanda. Lo que tenemos que hacer entonces es almacenar esos excedentes durante el día para que cuando llegue el pico entre las 7 y 9 p.m., tengamos las baterías cargadas e inyectemos energía a la red durante toda la noche”, puntualiza. 

Por ahora, España aspira a poder almacenar hasta 19 gigavatios de energías renovables; una cifra muy alta teniendo en cuenta que la demanda energética de todo el país ronda los 25 gigavatios.  

Con todo ello, Ismael Morales López reconoce que aún queda camino por andar en el campo de las energías renovables y dice que hay que ser prudentes en cuanto a las causas del gran apagón; aunque enfatiza en que es “altamente probable” que estas no sean las responsables.

 “Y también hay que recalcar que ahora mismo estamos en una transición energética. Esto quiere decir que estamos a mitad de camino entre el punto A y el punto C. Necesitamos otras energías alternativas hasta conseguir el 100 % renovable y que sea totalmente operable y resiliente. Las lecciones aprendidas vienen de los errores, vienen de que estamos en una crisis climática bestial y que tenemos un camino por recorrer sí o sí, y las renovables son la respuesta”, concluyó.